jueves, 24 de diciembre de 2015

Doce pinturas guadalupanas



Exposición con el tema de la Virgen del Tepeyac.



Convocados por la agrupación  Colores 33 un  grupo de artistas realizó doce pinturas con el tema de la Virgen de Guadalupe y las exhibe desde el viernes 18 en el Pasaje Picheta.

El grupo decidió enfocarse en la venerada imagen religiosa con motivo de las pasadas celebraciones realizadas, como cada año, en todo el país el 12 de diciembre.

Los cuadros son de formato grande y de distintas técnicas.  Los hay en acrílico  y óleo sobre lienzo, madera, lámina y hoja de plata, también hay impresión digital e ilustración tradicional.

La exposición se denomina “Nuestra reina La Guadalupana”.
Nueve de los participantes son mujeres: Alexandra Alvarez Icaza, Bertha Bolio, Beatriz Carrillo, Cecilia Cano,  Lilian Coello, Laura López, Lida Ponce, Regina Ponce y Aurora Vergara así como Rolando Caamal.  Hay tres varones: Manuel May Tilán y Didier Vázquez.

En esa colección de reproducciones de la Morenita del Tepeyac hay desde una clásica copia de la imagen original de la Virgen hasta  piezas que caerían en vertientes del modernismo, la abstracción y otras corrientes pictóricas más.


Esa muestra permanecerá en exhibición hasta el 10 de enero. (Mérida Cultura)

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Arte al paso de la gente




Una exposición colectiva cumple 20 años.



Este miércoles 23 por la mañana comenzó en los bajos del Palacio Municipal otra muestra colectiva más que organiza la agrupación Art’ Hó bajo la dirección del maestro Manuel Lizama Salazar y en la cual participan artistas de varias ramas y temas.

En caballetes o bien en soportes improvisados e incluso paredes y pisos del lugar esos creadores exhiben trabajos de pintura, escultura, grabado, cerámica y fotografía.

Son 17 participantes en total que estarán en ese  sitio todos los días,  hasta el 1 de enero, de las 9 de la mañana a ocho de la noche.


Esa  muestra tiene un  nombre suntuoso:  Festival de Artes Plásticas, se realiza desde 1995. En esta ocasión cumple 20 años, eso es un “katún”, en la numerología maya.

Esa exposición, indican sus organizadores, busca promover el arte plástico para que sea mejor apreciada por la población.

Sólo hay dos mujeres en ese grupo de artistas participantes. Ellas son Teresita Benitez y Lupita Pérez.

Los demás expositores son Román Albertos, José Luis Aké, Gloria Arenas, Martín Pérez Ponce, Julio Castillo, Raúl Zamora y Jesús  Araiza así como Armando Sánchez, Christopher Adach, Pedro  Guillén, Jorge Reyes, Wilbert Herrera, José Góngora, Walter Sánchez y Emir Rosado.

Los trabajos que ellos exhiben son realizados en distintas técnicas. Son de varios tamaños, temas y precios. 


Si en estas fechas visitas el Centro Histórico de la ciudad, entonces visita esa muestra. Quizá haya algo que pudiera interesarte. (Mérida Cultura).

viernes, 6 de noviembre de 2015

Joyas y hormigas de Yuri Gogol




Su singular  trabajo puede verse en esta ciudad.



Yuri Gogol es un  artista ruso radicado desde hace 20 años en  Argentina. Se especializa en  el uso de metales preciosos combinados con gemas para realizar sus creaciones de arte contemporáneo.

En piezas diminutas o de mayor tamaño combina oro y plata con esmeraldas, rubíes e incluso diamantes.

También es un admirador de las hormigas, a las que considera insectos sorprendentes y exitosos y les atribuye  un sentido de comunidad que,  dice, las hace superar sus obstáculos.

Opina que si la humanidad tuviera ese mismo  sentido de pertenencia  a un  gran grupo, como hacen las hormigas, entonces el planeta sería un mejor lugar para vivir y se acabarían muchas desgracias actuales que vemos en  cualquier país al que nos movamos.

Gogol descubrió que en su patria adoptiva también hay otros artistas que opinan lo mismo y crearon el “Movimiento hormigarte” que busca difundir esa ideas por medio de expresiones artísticas y  culturales pero también mediante la confección de prendas.

En 2012 Yuri Gogol estuvo en Yucatán para recorrer Chichén Itzá y otras partes de la península. En esa  ocasión conoció al fotógrafo yucateco Federico Espinosa “Chacpol”, cuyo proyecto de viejas puertas llamó su atención.

En 2013 viajó a Italia para exponer en la  Bienal  de Florencia, donde estrenó una nueva colección de obras basadas en las hormigas. Elaboró insectos de plata decorados con piedras preciosas, los muestra realizando sus tareas cotidianas: transportando hojas,  explorando, conviviendo,  etc. Exhibe las piezas sobre trozos de madera para aumentar el realismo que quiere transmitir al respecto. 

En 2014 regresó a México, donde conoció a Alejandra Jorge Macari, pintora y diseñadora de prendas que también recurre a la joyería y espejos para sus creaciones. Ella se interesó en la obra y el proyecto “Hormigarte” y lo invitó a exponer en Yucatán.

Desde octubre pasado Gogol abrió en el último piso del Gran Museo del Mundo Maya una  exposición denominada “La reina”, la cual ha mostrado en otros lugares e incluye parte de las piezas que ha creado con el tema de esos animalitos.

Esa exhibición incluye un “Makech”, el escarabajo que, según  una la leyenda maya, era un príncipe convertido en ese insecto a consecuencia de una maldición.  Su mujer amada lo  llevaba enjoyado en el pecho, a modo de prendedor.

Esa exhibición incluye fotografías para mostrar mejor las pequeñas piezas de joyería y hay un  decorado que simula  a  cientos de hormigas invadiendo ese recinto. También se colocó  un cartel sobre los conceptos de Yuri sobre esos animales: les atribuye virtudes como visión, convicción, pasión y perseverancia.

Considera que las hormigas consiguen sus objetivos gracias a su organización social y su sistema de vida en comunidad. Se pregunta:  “¿Podremos los seres humanos  llegar a ese nivel de evolución: a vivir buscando el bienestar de la sociedad?”. Opina que los animales y los seres humanos que son luchadores merecen un  mundo justo y equitativo.

Yuri y Alejandra han realizado proyectos artísticos juntos. Ella hizo murales a los cuales él  le incorporó hormigas. También diseñaron prendas para hombres y mujeres con bordados de esos insectos. Hay joyería de Alejandra que incorpora ideas del ruso-argentino.

Quienes acudan a ver la exposición “La reina” podrán aprovechar para observar en ese mismo salón  una  exposición de pinturas al óleo de la artista Carol Acereto. Son obras realistas y costumbristas relacionadas con la vida y la naturaleza de esta parte del país.


Ambas muestras están en la parte más alta del museo. La gente mayor tendrá que usar el lento elevador para llegar a ellas,  y las personas de menos edad arribarán ahí jadeantes después de subir la escalinata porque la escalera eléctrica que ahorra parte del tramo no funciona. 

Este problema y las interrupciones del espectáculo de luz y sonido de ese edificio son frecuentes. (Mérida Cultura).

lunes, 24 de agosto de 2015

Rodolfo Baeza en el grabado



 

 

Este creador ya nos sorprendió con sus pinturas, ahora nos impacta con la gráfica.


Con 38 años de edad y una década de trabajo el artista Rodolfo Baeza ya tiene un espacio propio en el amplio mundo de la pintura figurativa con aire impresionista.  Con sus exposiciones individuales y colectivas ha sembrado su bandera de calidad en ese territorio. Nadie discute merece ese sitio.

Su habilidad para mostrarnos a la gente desde su perspectiva visual se extiende ahora a la gráfica, otro terreno donde camina su creatividad en busca de nuevas puertas para abrirnos su mundo pero sin obligarnos a interpretarlo de la misma forma cómo él lo hace. Nos permite disfrutar del arte desde nuestras propias experiencias.


Baeza ha navegado los ríos de las expresiones visuales mediante el dibujo, la fotografía, el vídeo, la animación y la pintura. Esta última es la nave con la que más recorridos ha realizado en el país y el extranjero. Pudimos apreciar parte de sus obras en una muestra suya en el “Museo Fernando García Ponce-Macay”, que lamentablemente permanece cerrado desde principios del año.

Ahora nos muestra su última incursión, esta vez en la gráfica. Pero lo hace sin apartarse de su línea figurativa, mostrando a personas en procesos de dolor, duda, inquietud y otras expresiones más de los sentimientos profundos.
 

Dueto de juventud y talento.


En esta ocasión elaboró grabados con varias técnicas y dibujos al carbón que exhibe junto con las obras de otro joven pintor, amigo suyo e igual de talentoso: Ermilo Espinosa Torre.

Esta exposición que realizan juntos se llama “Entre la figuración y la revelación”, está abierta desde principios de este mes en el Centro Cultural Olimpo.

Es la primera vez este recinto recibe obras de Baeza, las cuales han sido mostradas en galerías privadas, museos, recintos culturales públicos y privados e incluso subastas, ya sea en exhibiciones colectivas o privadas.


Este creador nació en el Distrito Federal pero es de padres yucatecos, incluso creció y vivió en Mérida, excepto un lapso de 2001 a 2006 cuando residió en le metrópoli hacer estudios de animación y fotografía. 

El dibujo le atrae desde niño. Es diseñador gráfico de profesión. En sus retratos, como ya dijimos, busca reflejar emociones humanas. Su taller está en el barrio de Santiago.

Te recomendamos visitar la propuesta que nos trae en el ramo de la gráfica, un segmento del arte que debería impulsarse más en Yucatán (Mérida Cultura). 

Nota: La foto que muestra a Rodolfo Baeza fue tomada del Museo Fernando García Ponce-Macay)

sábado, 15 de agosto de 2015

Cataráta óptica



 

 

Llamativa exposición de doce artistas y un fotógrafo que sacuden la mente.


Postmodernidad,  simetría, eclecticismo, amalgama e inventiva son parte de los calificativos que puede aplicarse a las diez llamativas instalaciones que desde principios de este mes se exponen en el Centro Cultural Olimpo.

También se les puede asignar los adjetivos de naif, kitchs, outsider, transculturalidad y misticismo así como exuberancia, imaginario e Inclusivo. Todas las designaciones caben, ninguna por sí sola  alcanzaría para describir lo que ahí se muestra.

Realmente es difícil describir esa instalaciones, parecen un carnaval de arte. Pero al hacer esta afirmación caemos en el error de intentar describir con una o dos palabras en qué consiste ese trabajo que presentan 12 artistas, los cuales a su vez ofrecen también el reto de ser descritos o encajonados en una corriente creadora.

Esa exposición se denomina “Burbujas. Vivir en el arte”. Quien la bautizó de este modo se libró del quebradero de cabeza de intentar buscar un nombre que describa o englobe lo que ahí ve en esa sala.
Lo que sí se puede afirmar que quien ingresa para visitarla recibe un golpe visual. Un torrente de colores, formas, estructuras y detalles caen sobre ojos, es una divertida catarata óptica que sacude al cerebro.     

Las burbujas

 
José Luis Rodríguez de Armas fue encargado de reunir a esos creadores cuyo trabajo genera disfrute o reflexión o ambas cosas. 

Este curador señaló que en esa exposición de instalaciones el espectador es quien da una interpretación a lo que ahí ve. Cada instalación es una burbuja con una intención, el visitante debe descubrir cuál es esta.

Explicó que el nombre de “Burbujas” se escogió para designar esos espacios llenos de imaginación.

Los 12 expositores (dos mujeres y diez varones) no quieren ser catalogados dentro de alguna corriente artística. Pero ante la presión al respecto consideran que ellos caen dentro del calificativo de “outsiders”, aquellos que realizan actividades cercanas a lo que generalmente se conoce como arte, pero sin ser reconocidos como artistas.

Esas instalaciones fueron realizadas por Guillermina Pech, Carmen Tec Sulub, Carlos Cámara Freyre, José Juan Guillermo Cetina, José Collí Poot, Eddie Cofy, Yul Sergei Durán Chong, Israel Koh, José del Carmen Martínez Encalada, Ricardo Ortegón Padrón, Hilario Quintal Balam y José Urzaiz Ancona.

El proyecto “Burbujas” comenzó a gestarse hace un año cuando el curador descubrió a parte de esos creadores. Al resto los contactó por recomendación de sus alumnos.

Los trabajos de esos “outsiders” está en sus talleres-bodega. Para apreciar cómo son estos, el fotógrafo Pim Shalkwijk los visitó para realizar imágenes en gran formato de esos sitios y colocarlos junto con las instalaciones. 
De esta forma, el público que vista la muestra tiene la impresión de entrar al sitio de labores que ahí se presentan.

Esta exposición permanecerá abierta al público hasta el último día de octubre. Te recomendamos asistir y generar tu propio calificativo para estas instalaciones (Mérida Cultura).

domingo, 9 de agosto de 2015

Mirada artística a las etnias



 

 

La obra de León Belauzaran visita Mérida.


Las poblaciones indígenas del país siempre han despertado interés entre los artistas visuales. La profusión de elementos que hay en la vida de esos pueblos impele a los artistas a capturarlos en pinturas, fotografías, esculturas y otros medios más para mostrar la singular belleza de esas comunidades, sus particulares formas de vida o la estrujante desigualdad que padecen.

El pintor chihuahuense León Belauzaran es uno de ellos. Esto puede verse desde la semana pasada en esta ciudad en una exposición de 18 cuadros de distintas técnicas y tamaños que ese artista montó en el Pasaje Picheta.

Con 66 años de edad este creador sigue gustosamente atrapado en la pluralidad antropológica de las etnias mexicanas. Esa es la principal corriente de su pincel desde que dejó las escuelas San Carlos y La Esmeralda y se lanzó a la conquista de sus propios espacios. Ese camino lo comenzó en su condición de alumno de distintos pintores que lo ayudaron a emprender su camino hacia temas mexicanos.

En sus obras este creador nos muestra aspectos de algunos de los muchos pueblos indígenas que forman la riqueza cultural mexicana. Los quehaceres, costumbres, oficios, vestidos, alimentos, tradiciones religiosas y el ambiente en que viven esas comunidades rurales son parte de lo que puede apreciarse en las pinceladas de este artista.

Su intención.

 
“Bajo mi propio riesgo intento expresar la cosmovisión y filosofía de las etnias del país”, ha expresado al hablar de su trabajo.

Considera que en esos pueblos de la nación todavía se conserva “un profundo misticismo y religiosidad”, y parte de esto es otro elemento que él trata de reflejar en sus cuadros.  

Al respecto, Belauzaran ha dicho que sus pinturas pueden expresar todo respecto a ese tema. La mujer es la figura principal en sus trabajos. Otros aspectos que llaman su atención son la indumentaria indígena y la variedad antropológica de esta.  

Debido a su larga trayectoria, este pintor ha mostrado su trabajo en numerosos sitios. Hay lugares donde algunos de sus trabajos pueden apreciarse permanentemente. En la ciudad de México hay cuadros suyos expuestos en los hoteles Sheraton, Camino Real, Aristos y Nikko.

Ha realizado cerca de 20 exposiciones individuales en galerías y otros espacios de las ciudades de México, Zihuatanejo, Puerto Vallarta, Mazatlán, Acapulco, Pachuca, San Miguel de Allende, Monterrey y Cuernavaca así como en Los Angeles, Cal., y en Cali, Colombia.

Entre las muestras colectivas en las que ha participado está una en el Museo “Rufino Tamayo”.
Al parecer, es la primera vez que trae una exposición a esta ciudad.

Por cierto, las autoridades encargadas de la galería del Pasaje Picheta deberían poner mayor atención y dar mejor trato a los artistas que exponen ahí sus trabajos. 

En el caso de Belauzaran la información para el visitante consiste en folletos pegados con cinta engomada en la puerta y la pared. No se quiso gastar en un cartel debidamente elaborado con información sobre el artista y la obra que ahí se muestra. 
Los ciudadanos aportamos impuestos de sobra para las tareas culturales y de otro tipo. Pero ese dinero no se destina a los fines correctos. No cabe duda, la corrupción llega a todos los rincones. (Mérida Cultura).