Plural exposición de artistas mexicanos.
Desde hace
unos días se exhibe en la galería principal del teatro “José Peón Contreras”
una colección de pinturas, grabados y
esculturas que el gobierno federal obtuvo mediante el sistema de pago en especie utilizado por los creadores para
cumplir con sus obligaciones tributarias con el fisco.
La
Secretaría de Hacienda transfirió esas obras a la autoridad de Yucatán para que
este las promueva y exponga en forma permanente en distintos recintos para
darles difusión. Parte de ese material fue producido hace 16 años.
Esos
trabajos son un segmento de un gran acervo nacional que comenzó a formarse en
1957 cuando, a propuesta del muralista
David Alfaro Siqueiros, se determinó aceptar esa forma en que los artistas
puedan cumplir con sus impuestos. Esto
beneficia a los creadores y a los admiradores del arte.
Esta es la primera vez que el gobierno de
Yucatán tiene bajo su control y
protección permanentes un conjunto de obras provenientes de artistas de
distintas partes del país.
Esa
colección que se muestra en el teatro ya citado consta de 69 piezas. Ella
permitirá a los artistas visuales locales y al público local estar en contacto
constante con la obra de pintores, grabadores y escultores de otras regiones y
así conocer de sus técnicas, sus líneas conceptuales y el estilo que los caracteriza así como los temas
que eligen para expresarse.
Las variadas
dimensiones de los cuadros y piezas escultóricas son parte de los elementos que
marcan las diferencias.
Debido a que
todos esos trabajos corresponden a distintos autores y fueron acopiadas en
épocas diferentes, ese acervo no tiene una cohesión total, aunque puede encontrarse en él ciertos puntos de unidad. Pero esta mezcla permite
tener una visión general de tendencias recientes del arte mexicano.
En el
pequeño cartel que se colocó para explicar esa exposición, se dice que los
temas y estilos ahí presentados “van desde las fuertes influencias académicas
hasta los diversos tipos de abstracción”.
Se agrega
que otra característica que se observa en esa exposición es la tendencia que
hay en varios cuadros “a superponer obras de gran cuidado en la figuración con
entornos abstractos”.
“Se ven
muchos ejemplos de figuras reconocibles, sobre todo humanas”, prosigue el
texto. “A su vez, las obras abstractas muestran ejemplos de lirismo y también
de una fuerte expresión”.
“Todo el
conjunto, con sus enlaces y divergencias, deja en claro la persistencia de una
recia vitalidad en el arte mexicano”,
finaliza el comunicado.
Entre los
trabajos que ahí se muestran está “La mesa”, un
grabado de Antonio Valencia García realizado en 2010; la acuarela
“Develación”, realizada por Luis González Medina en 1999, y “Savana”, una pieza
de resina policromada de Ulises Sánchez
Morfín, realizada en 2013.
En materia
escultórica están los bronces “Vochito”, de Alberto García Neva, creado en
2011, y “Agazapado”, de Alejandro
Fuentes Gil, realizado en 2013.
Hay una
laserografía sobre papel denominada
“Profilaxis mas 4 Chiapas”, hecha en
2010 por Luis Ricaurte Villota. Se ve también un trabajo de alambre y pintura
elaborado en 2008 y bautizado como “Casa/hogar” por su creador Rusell Birks Bucks.
Entre los
cuadros de gran tamaño están “Torso masculino con ave”, creado en 2001 mediante
la combinación de técnicas de pastel y óleo sobre papel, y realizado por José
Fors Ferro. Otro más es un acrílico
sobre tela denominado “Iglesia en día de fiesta”, hecho en 1999 por Leni
María Von Bertrab Schott.
En esa
colección se ofrece además grabado, monotipia, gráfica, punta seca, linografía
y serigrafía así como resina policromada, grafito, lápiz, carbón y, por
supuesto, óleo. Hay también combinación
de óleo con carbón, vinílica y técnica mixta.
Hubiera sido
deseable que esa exposición ocupara un espacio más grande y se incluyera
información sobre los artistas así como mayores datos sobre los trabajos que ahí se muestran. Sería
interesante saber, por ejemplo, cuántos autores son los que hicieron esas obras
y de entidades federativas proviene. También conocer cuántas producciones hay
ahí por cada género o técnica, o bien
agruparlas por año en que fueron
realizadas, e informar cuál es la más pequeña y la más grande, etcétera.
De todas formas, incluso con la escasa
información disponible, es disfrutable recorrer esa muestra y sumergirse en ese
mundo de tanta variedad. (Mérida Cultura)